FAQ Auditorías de la cadena de suministro

Una auditoría de la cadena de suministro le permite asumir la responsabilidad de la seguridad laboral dentro de su cadena de suministro. También abre nuevas posibilidades de comercialización. La adhesión al Código de Conducta refuerza la confianza de los grupos de interés en su empresa. También obtiene una ventaja competitiva clave en los procedimientos de licitación al utilizar normas sociales para demostrar que cuestiones como la sostenibilidad social y ética son importantes para usted. Usted crea una forma de demostrar su compromiso social asumiendo la responsabilidad de una producción y unas condiciones de trabajo justas. Y: Con un alto estándar social como amfori BSCI (Business Social Compliance Initiative) usted ahorra tiempo y dinero. La auditoría amfori BSCI sustituye a las costosas auditorías múltiples para diferentes clientes.

Los estándares sociales más comunes son establecidos por iniciativas, por ejemplo la amfori BSCI (Business Social Compliance Initiative). Otros estándares importantes y reconocidos a nivel mundial son ICS (Initiative for Compliance and Sustainability o Initiative Clause Social), RBA (Responsible Business Alliance), SA8000 (Social Accountability), WRAP (Worldwide Responsible Accredited Production), PSCI (Pharmaceutical Supply Chain Initiative) y SMETA (Auditoría de Comercio Ético de Miembros de Sedex). También existen programas específicos para cada cliente para un código de conducta. Estos incluyen servicios de auditoría de códigos de conducta independientes e imparciales que pueden alinearse con la legislación local, las normas internacionales o los propios códigos de los clientes. Además, se pueden añadir normas ISO como QMS (Sistema de Gestión de Calidad), EMS (Sistema de Gestión Medioambiental) e ISO 45001 para la salud y la seguridad en el trabajo.

Esto depende de la rama de la empresa, del tamaño y de las prioridades individuales. Por ejemplo, los campos tradicionales de la RSE (Responsabilidad Social Corporativa) y HSE (Salud, Seguridad y Medio Ambiente) pueden complementarse con otras áreas de enfoque. Estos podrían incluir áreas de riesgo específicas, como la protección contra incendios en las fábricas textiles. Otras empresas podrían concentrarse en las áreas del derecho laboral, el manejo de materiales estructurales o la protección de datos. A petición, también ofrecemos una lista individualizada de prioridades basada en nuestros muchos años de experiencia y en un análisis individualizado. También apoyamos a las empresas en la formulación de su propio código de conducta.

Nuestros auditores actualizan continuamente sus habilidades, operan en todo el mundo y comparten sus experiencias cada año. Están autorizados a auditar de acuerdo con todas las normas sociales internacionales vigentes, y también pueden realizar auditorías centradas en otras áreas durante una cita con el cliente, por ejemplo, la protección del medio ambiente o la manipulación de productos químicos. Podemos demostrar que nuestros auditores en el sector de la auditoría social, que existe desde hace 20 años, tienen una experiencia media de diez años. Esto los convierte en los auditores más experimentados del sector.

La complejidad de los esquemas, es decir, de las listas de comprobación, depende de la empresa y del estándar que utilicemos, como amfori BSCI (Business Social Compliance Initiative) o SMETA (Sedex Auditoría de Comercio Ético de los Miembros). En general, la mayoría de las normas sociales son mucho más detalladas que las normas ISO.

Nuestros auditores tienen que rellenar cuestionarios con precisión, investigar muchos puntos específicos, realizar entrevistas, llevar a cabo investigaciones y realizar comprobaciones cruzadas. El esfuerzo requerido para este proceso también depende de la rama de la empresa, el tamaño y las prioridades individuales. Cuando nuestros expertos auditan grandes empresas, trabajan en equipo. Una auditoría suele durar varios días.

La abreviatura BSCI significa Business Social Compliance Initiative (Iniciativa de Cumplimiento Social Empresarial). Fue creada en 2003 por la Asociación de Comercio Exterior (FTA, rebautizada como amfori en 2018). Los miembros de amfori BSCI han desarrollado el Código de Conducta de amfori BSCI, cuyas disposiciones se basan, entre otras cosas, en las normas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Carta de Derechos Humanos de la ONU y las leyes y reglamentos nacionales.

A través de su participación en el amfori BSCI, las empresas se comprometen a reconocer las disposiciones del Código de Conducta en su entorno empresarial y a aplicarlas en su política empresarial con las medidas adecuadas. Los proveedores también deben asegurarse de que los subcontratistas se adhieren al Código de Conducta BSCI de amfori. El cumplimiento del Código de Conducta se supervisa mediante auditorías realizadas por empresas de auditoría independientes.

El acrónimo SEDEX significa Supplier Ethical Data Exchange (Intercambio de datos éticos de proveedores). Con una membresía sin fines de lucro en esta organización, las empresas se comprometen a la mejora continua del desempeño ético dentro de sus cadenas de suministro. Fundada en 2011 por un grupo de minoristas del Reino Unido, la organización impulsa la convergencia de las normas de auditoría social y las prácticas de supervisión. Este compromiso tiene por objeto aliviar la carga de auditoría de los proveedores mediante el intercambio de informes y el desarrollo de mejoras en las normas de la cadena de suministro.

Con este fin, se creó la Auditoría de Comercio Ético de los Miembros de Sedex (SMETA). La auditoría fue desarrollada en respuesta a la demanda de los miembros de un informe de auditoría ética que pudiera ser compartido más fácilmente. SMETA está diseñado para reducir o evitar la duplicación de esfuerzos en la auditoría de comercio ético, lo que beneficia a los minoristas, las marcas de consumo y sus proveedores.

Si una empresa se convierte en miembro de una iniciativa como amfori BSCI, puede comparar su propia cadena de proveedores con la base de datos de amfori BSCI. De este modo, podrá saber cuáles de sus proveedores no han sido auditados todavía. Y así es como las empresas pueden saber dónde todavía hay margen de mejora en términos de HSE (Health Safety Environment) y CSR (Corporate Social Responsibility).

Los auditores de TÜV Rheinland verifican el estado de los proveedores mediante un cuestionario que puede basarse en las normas específicas del cliente o en normas internacionales. Así es como creamos comparabilidad. Nuestros auditores saben por experiencia cómo organizar investigaciones para monitorear estos factores. Además, las auditorías pueden ampliarse individualmente, por ejemplo, realizando una auditoría medioambiental paralelamente a la auditoría social.

Después de una auditoría, nuestros auditores trabajan junto con el cliente para crear un plan de acción correctiva. Este plan especifica qué desviaciones de la norma deben corregirse para cuándo, así como la fecha en que debe realizarse una auditoría de seguimiento. Por lo general, se formula un plan de acción correctiva el mismo día de la auditoría. Comprobamos de nuevo el cumplimiento en nuestras auditorías de seguimiento.

El mayor problema es la verificabilidad de los horarios de trabajo. Le siguen las deficiencias de HSE (Health Safety Environment), no sólo en lo que se refiere a los edificios, sino también en el manejo de equipos como máquinas de coser y ropa de trabajo segura. La discriminación existe especialmente en la industria textil, en la que las mujeres representan alrededor del 80 por ciento de la fuerza laboral. Y en muchas empresas no hay empoderamiento de los empleados. En consecuencia, los empleados no se atreven a expresar sugerencias de mejora o críticas que sean realmente útiles para la empresa. Nuestros auditores también investigan estos aspectos y descubren dónde puede mejorar la empresa.

Tiene sentido que una empresa tenga su propio código de conducta si desea ir más allá de las normas existentes o centrarse en sus propias áreas de interés especial. Por ejemplo, en el sector farmacéutico, la atención podría centrarse en la manipulación capacitada de materiales peligrosos. En este ámbito, las directrices existentes no cubren todos los aspectos de seguridad. Para las empresas con requisitos tan especiales, no basta con unirse a una iniciativa. El establecimiento de altos estándares propios de una empresa para sus asociaciones con proveedores minimiza el riesgo de incidentes en la cadena de suministro. También vale la pena ser pionero antes de que la legislación estatal establezca nuevos estándares externos en áreas como la protección de datos, por ejemplo. Además, al formular su propio código de conducta, más estricto, las empresas pueden distinguirse de sus competidores, lo que constituye un paso importante hacia el liderazgo en el mercado.

La seguridad en el trabajo, por ejemplo, es un tema importante para las empresas que tienen un gran número de operaciones de almacenamiento. Si una empresa desea concentrarse en un trabajo justo y seguro, debe orientarse de acuerdo con los códigos de conducta éticos y sociales existentes, como la Declaración Universal de Derechos Humanos de las Naciones Unidas o los Convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). La norma ISO 14001 es uno de los códigos recomendados para las cuestiones medioambientales. Las empresas pueden utilizar bloques de construcción como estos para crear su propio código de conducta personalizado.

Llevamos a cabo un análisis de los llamados hotspots para averiguar exactamente dónde se encuentran los puntos de mayor riesgo en la cadena de suministro, lo que constituye uno de los primeros pasos hacia un código de conducta preciso. Estos factores pueden variar de un sector a otro. Los auditores de TÜV Rheinland verifican el estado de los proveedores mediante un cuestionario que puede basarse en las normas específicas del cliente o en normas internacionales. Nuestros auditores saben por experiencia cómo organizar investigaciones para controlar los puntos débiles.

Una vez que se haya completado el código de conducta, es necesario establecerlo en la cadena de suministro. TÜV Rheinland ayuda a definir un proceso de auditoría individual que determina con qué frecuencia debe auditarse la cadena de suministro y hasta cuándo deben corregirse las desviaciones. El programa de auditoría también puede establecer prioridades para los criterios más importantes, por ejemplo, la protección contra incendios. Podemos estructurar los informes según los deseos del cliente. Son posibles todo tipo de formatos, desde la simple información de si la auditoría ha sido aprobada o no, hasta informes detallados centrados en aspectos como la seguridad laboral o la sostenibilidad medioambiental. Esto permite a las empresas descubrir sus puntos débiles y realizar mejoras específicas en áreas críticas.

Nuestros auditores son miembros registrados de la Asociación de Auditores Profesionales de Cumplimiento Social (APSCA), actualizan continuamente sus habilidades, operan en todo el mundo y comparten sus experiencias cada año. Contamos con gerentes para cada esquema basados en los estándares internacionales que mantienen actualizados a nuestros expertos. Los auditores están autorizados a auditar de acuerdo con todas las normas sociales internacionales vigentes, y también pueden realizar auditorías centradas en otras áreas durante una cita con el cliente, por ejemplo, la protección del medio ambiente o la manipulación de productos químicos. Podemos demostrar que nuestros auditores en el sector de la auditoría social, que existe desde hace 20 años, tienen una experiencia media de diez años. Esto los convierte en los auditores más experimentados del sector.

El Dow Jones Sustainability Index (DJSI) es un índice bursátil que incluye a los líderes mundiales de la sostenibilidad. Para ser inscritas en esta lista, las empresas deben cumplir criterios económicos, ecológicos y sociales.

Los estándares sociales más comunes son establecidos por iniciativas, por ejemplo la amfori BSCI (Business Social Compliance Initiative). Otros estándares importantes y reconocidos a nivel mundial son ICS (Initiative for Compliance and Sustainability o Initiative Clause Social), RBA (Responsible Business Alliance), SA8000 (Social Accountability), WRAP (Worldwide Responsible Accredited Production), PSCI (Pharmaceutical Supply Chain Initiative) y SMETA (Auditoría de Comercio Ético de Miembros de Sedex). También existen programas específicos para cada cliente para un código de conducta. Estos incluyen servicios de auditoría de códigos de conducta independientes e imparciales que pueden alinearse con la legislación local, las normas internacionales o los propios códigos de los clientes.

Además, se pueden añadir normas ISO como QMS (Sistema de Gestión de Calidad), EMS (Sistema de Gestión Medioambiental) e ISO 45001 para la salud y la seguridad en el trabajo.

Tiene sentido que una empresa tenga su propio código de conducta si desea ir más allá de las normas existentes o centrarse en sus propias áreas de interés especial. Por ejemplo, en el sector farmacéutico, la atención podría centrarse en la manipulación capacitada de materiales peligrosos. En este ámbito, las directrices existentes no cubren todos los aspectos de seguridad. Para las empresas con requisitos tan especiales, no basta con unirse a una iniciativa. El establecimiento de altos estándares propios de una empresa para sus asociaciones con proveedores minimiza el riesgo de incidentes en la cadena de suministro. También vale la pena ser pionero antes de que la legislación estatal establezca nuevos estándares externos en áreas como la protección de datos, por ejemplo. Además, al formular su propio código de conducta, más estricto, las empresas pueden distinguirse de sus competidores, lo que constituye un paso importante hacia el liderazgo en el mercado.

Después de la auditoría, nuestros auditores trabajan junto con el cliente para crear un plan de acción correctiva. Este plan especifica qué desviaciones de la norma deben corregirse para cuándo, así como la fecha en que debe realizarse una auditoría de seguimiento. Por lo general, se formula un plan de acción correctiva el mismo día de la auditoría. Comprobamos de nuevo el cumplimiento en nuestras auditorías de seguimiento.

La auditoría de proveedores in situ comienza con una discusión inicial en la que se explican el objetivo y el procedimiento de la auditoría. A continuación, los auditores investigan si el proveedor está cumpliendo con las directrices. Llevan a cabo entrevistas confidenciales con los empleados y gerentes, revisan y copian documentos tales como contratos de trabajo, y comparan estos documentos con las condiciones reales de trabajo. Nuestros auditores toman fotos de las operaciones de trabajo en un recorrido por las instalaciones y documentan los resultados de su auditoría. Durante las entrevistas confidenciales con los empleados, los auditores vigilan la discriminación, y en su visita a las instalaciones buscan trabajo infantil y lagunas en el sistema de seguridad. La auditoría termina con una discusión final.

El plan de acción correctiva puede programar un plazo de hasta doce meses. Después de eso, hay que repetir toda la auditoría.

Nuestros auditores son miembros registrados de la Asociación de Auditores Profesionales de Cumplimiento Social (APSCA), actualizan continuamente sus habilidades, operan en todo el mundo y comparten sus experiencias cada año. Contamos con gerentes para cada esquema basados en los estándares internacionales que mantienen actualizados a nuestros expertos. Los auditores están autorizados a auditar de acuerdo con todas las normas sociales internacionales vigentes, y también pueden realizar auditorías centradas en otras áreas durante una cita con el cliente, por ejemplo, la protección del medio ambiente o la manipulación de productos químicos. Podemos demostrar que nuestros auditores en el sector de la auditoría social, que existe desde hace 20 años, tienen una experiencia media de diez años. Esto los convierte en los auditores más experimentados del sector.

La Asociación de Auditores Profesionales de Cumplimiento Social (APSCA) es la asociación líder de la industria de auditoría de cumplimiento social. Su objetivo es mejorar la consistencia, credibilidad y profesionalismo de las organizaciones de auditoría y de los auditores individuales que realizan auditorías de cumplimiento social independientes. La asociación también promueve el uso de auditorías independientes de cumplimiento social para mejorar las condiciones de trabajo en todo el mundo. Los auditores registrados en la APSCA han validado sus competencias y cumplen con las altas exigencias de los servicios profesionales de auditoría.

TÜV Rheinland es un proveedor de servicios de auditoría independiente líder a nivel mundial. Los empleados del grupo trabajan en todo el mundo en unas 500 instalaciones en 69 lugares. Ofrecemos nuestros servicios en todo el mundo.

El término "esquema" describe los requisitos y regulaciones de las normas internacionales como amfori BSCI que deben cumplir las empresas auditadas. Un "programa" puede ser un código de conducta individual creado específicamente para una empresa.

El cumplimiento de normas internacionales como amfori BSCI (Business Social Compliance Initiative) o SMETA (Sedex Members' Ehtical Trade Audit) garantiza la integridad social y la sostenibilidad de una empresa. Estas normas incluyen normas de seguridad como la seguridad contra incendios y aspectos sociales como los horarios de trabajo, el trabajo infantil y la discriminación. Además de estos aspectos éticos, el cumplimiento de un alto estándar reconocido internacionalmente y que ofrece comparabilidad puede proporcionar una ventaja competitiva. Los proveedores adquieren nuevos clientes con los requisitos correspondientes y las empresas refuerzan su integridad y pueden comercializar sus marcas con mayor confianza en sí mismas. Los consumidores prestan mayor atención a la reputación de los productos y marcas fabricados de manera justa.

Tiene sentido que una empresa tenga su propio código de conducta si desea ir más allá de las normas existentes o centrarse en sus propias áreas de interés especial. Por ejemplo, en el sector farmacéutico, la atención podría centrarse en la manipulación capacitada de materiales peligrosos. En este ámbito, las directrices existentes no cubren todos los aspectos de seguridad. Para las empresas con requisitos tan especiales, no basta con unirse a una iniciativa. El establecimiento de altos estándares propios de una empresa para sus asociaciones con proveedores minimiza el riesgo de incidentes en la cadena de suministro. También vale la pena ser pionero antes de que la legislación estatal establezca nuevos estándares externos en áreas como la protección de datos. Además, al formular su propio código de conducta, más estricto, las empresas pueden distinguirse de sus competidores, lo que constituye un paso importante hacia el liderazgo en el mercado.

El cumplimiento es un proceso continuo y los estándares se actualizan regularmente. Por ejemplo, la auditoría amfori BSCI tiene una validez de dos años. Después de estos dos años ya no se puede garantizar que la empresa auditada siga cumpliendo los requisitos, sino que es necesaria otra auditoría para prorrogar la validez por otros dos años. Esto también ayuda a asegurar que el cumplimiento de la compañía cumpla con los últimos cambios del estándar.

La norma ISO 14001 rige las normas de protección del medio ambiente que están diseñadas para evitar las tensiones ecológicas de acuerdo con los requisitos socioeconómicos. Como norma ambiental establecida, la ISO 14001 es el instrumento más importante del mundo para la implementación y aplicación de un sistema de gestión ambiental eficaz.

La norma ISO 45001 tiene por objeto satisfacer las crecientes expectativas en materia de gestión de la salud y la seguridad en el trabajo. Las empresas pueden reducir el número de accidentes en el lugar de trabajo mediante un enfoque sistemático de los aspectos de salud y seguridad en el trabajo con la certificación ISO 45001, independientemente de su sector o del tamaño de la empresa. Las fuentes de errores son identificadas y eliminadas. De este modo, las empresas pueden garantizar el cumplimiento de los requisitos legales y reglamentarios para la protección de la salud y la seguridad en el trabajo.

Si una empresa se convierte en miembro de una iniciativa como amfori BSCI, puede comparar su propia cadena de proveedores con la base de datos de amfori BSCI. De este modo, podrá saber cuáles de sus proveedores no han sido auditados todavía. Y así es como las empresas pueden saber dónde todavía hay margen de mejora en términos de HSE (Health Safety Environment) y CSR (Corporate Social Responsibility).

Las auditorías de la cadena de suministro de acuerdo con una norma social internacional permiten a las empresas asumir la responsabilidad de su cadena de suministro y mostrar su sentido de responsabilidad por una producción y unas condiciones de trabajo justas y seguras. Esto abre nuevas posibilidades de marketing y refuerza la confianza de los clientes y consumidores, así como de los socios comerciales y empleados. Las normas internacionales comunes como amfori BSCI incluyen muchas otras normas de alto nivel. Por lo tanto, las empresas ahorran costes y tiempo al evitar múltiples auditorías. Además, las mejoras según una auditoría suelen ir acompañadas de una gestión más eficiente de la cadena de valor de la empresa.